REVIEW MSC MUSICA 2023 - ELENA RAMIREZ

Caldera de Santorini
Santorini vista del MSC Musica desde lo alto - © Elena Ramírez

CRUCERO POR LAS ISLAS GRIEGAS A BORDO DEL MSC MUSICA


Un viaje de crucero por las Islas Griegas, es uno de los que todo crucerista debe hacer al menos una vez en su vida.


Pasamos a detallaros como vivimos nuestro viaje, lo que nos gustó y lo que no. Os dejamos nuestra review para vuestra lectura esperando que os guste.


DÍA 1. ATENAS

A las 3:30 estábamos en el aeropuerto de Barcelona. Un responsable de MSC Cruceros nos recibió y comunicó que a las 4:00 se abrían los mostradores de facturación de Vueling. En la fila comenzamos a conocer a los pasajeros del barco, una familia muy agradable con trillizos. También nos encontramos con Estefanía y su grupo, la habíamos conocido a través de Facebook.

El avión salió puntual, además, por las cosas de la física, adelantó bastante, en lugar de 3 horas tardamos sólo 2 y media. En el avión nos colocaron con Sandra y su marido Juan delante de ella. Llegamos a Atenas y las maletas tardaron bastante en salir.

Saliendo del aeropuerto por la puerta principal, nos estaban esperando los responsables de MSC. Nos informaron dónde debíamos acudir en espera del autobús que nos llevaría al puerto del Pireo para realizar el check-in y proceder al embarque. Seguimos conociendo a otra familia, dos profes de Mallorca y sus hijos.

Una vez acomodados en el autobús y después de tres cuartos de hora de trayecto llegamos a nuestro destino. Al acceder a la terminal, divisamos el mostrador de la naviera, dejamos las maletas previa presentación de la documentación, y entramos en el edificio. Segundo mostrador, allí presentamos la documentación, nos facilitaron las tarjetas y nos hicieron la foto de seguridad para unirla con la tarjeta. También nos facilitaron la primera información acerca de las actividades de esa misma tarde.

Crucero Islas Griegas
Elena y Julián, autores de esta review - © Elena Ramírez

Por fin embarcamos y nos fueron guiando, lo primero, la típica foto de embarque, después el mostrador de Internet y el de fotos. Allí mismo nos configuraron nuestro acceso al wifi que llevábamos contratado. Conectarse es fácil, se accede a través de: www.mscwifi.com, pide el número de camarote y la fecha de nacimiento. Con estos datos y un detalle en el móvil, seleccionas la wifi, en ajustes, tipo de dirección MAC, hay que seleccionar Mac del teléfono y ya tenemos la wifi dispuesta. Les comentamos que teníamos el paquete de fotos contratado y nos emplazaron a hacernos las primeras fotografías esa misma noche en el puente 6.

PASOS PARA CONECTARSE AL PAQUETE DE INTERNET CONTRATADO
  • Conectarse a www.mscwifi.com
  • Introducir número de camarote
  • Introducir fecha de nacimiento
  • En la dirección MAC, poner "Mac del teléfono"
Con estos datos y algún detalle más, tenéis configurado vuestra conexión            

Dimos una vuelta por el barco y nos fuimos al camarote. El camarote estaba ya preparado, así que dejamos las cosas. En la cama se encontraba el diario de a bordo de ese día y la carta de presentación del club, posteriormente llegó un documento para una reunión con la persona de “El corte inglés”, agencia con la que habíamos contratado el crucero. Seguidamente nos fuimos a comer al buffet en la cubierta 13.

El camarote nos pareció algo más pequeño que el del año pasado, pero estaba bien. Número 10238. En popa, como nos gusta para ir viendo la estela del mar al navegar.

Un camarote en popa, es nuestra preferencia para disfrutar viendo la estela del mar.

El buffet es curioso, no es simétrico como en otros barcos, sino que en cada estación hay diferentes platos. Os recomiendo que miréis en todas. Me chocó que no hubiera ningún espacio en dónde hicieran pasta al momento, pero sí había estación de ensaladas, fruta fresca, tanto en macedonia como en trozos y entera. La piña estaba buenísima.

Otra cosa importante es que hay espacios de bebidas en el buffet dónde sirven lo que pidas, además de camareros dispuestos a traértelas.

También hay que recalcar que hay un espacio para pizzas, hamburguesas, perritos y patatas. De esto había casi todo el día, en concreto, las pizzas, de 6:00 a 1:00 de la mañana, vamos, que siempre hay pizza preparadas para comer, además, hay que decir que probé dos trozos y estaban muy buenas. Las hamburguesas pasables pero un día que tenía hambre me comí una y cumplió su labor.

En cuanto al resto de la comida, lo normal en un buffet.

Acudimos al camarote a realizar el simulacro de emergencia, avisaron por megafonía. Consistía en ver un vídeo en la tv del camarote, marcar un número en el teléfono y acudir a la estación correspondiente, punto de reunión, en nuestro caso la H, dónde registran la asistencia de cada pasajero, no hace falta llevar el chaleco. La letra de la estación viene detrás de la puerta del camarote, así como la forma o itinerario para llegar, también tenéis la letra indicada en vuestra tarjeta del crucero. Avisan por megafonía de que la asistencia es obligatoria. Si no tienen constancia de vuestra presencia, os lo recordarán cada día para que lo hagáis.

La asistencia al simulacro de emergencia es obligatoria.

A las 16:30 acudimos a la reunión para españoles. La verdad es que nunca había visto tan poca gente en esta reunión. Nos dieron información, poca, sobre la vida a bordo y algo acerca de las excursiones. Realizaron el sorteo de una excursión y de un 30% de descuento en otra excursión. Este segundo premio me tocó a mí. Como yo ya llevaba todas las excursiones que quería hacer contratadas desde casa se lo comuniqué a Natalia, de excursiones, y me dijo que lo comentaría. Lo pregunté yo en excursiones días más tarde y me regalaron los traslados al puerto viejo de Limassol para los dos. Un detalle.

En recepción pregunté por el acceso prioritario, para socios Gold a las lanchas para ir a Santorini, ya que, para conseguirlos, había que ir a las 7:00 a un punto que aparece en el diario de a bordo del día siguiente y me consta que había mucha gente a esa hora. A mí me los dejaron esa noche en el camarote, podíamos bajar cuando quisiéramos siguiendo al grupo que en ese momento estuviera desembarcando.

Llegó el momento de registrar nuestra tarjeta de crédito, ya que es más cómodo. Fue fácil, hay unas máquinas en el barco en el aparecen las instrucciones en castellano, también hay personal que te ayuda en caso de no aclararse. En esas mismas máquinas podéis llevar un control de los gastos a lo largo de los días y la cuenta final el último día. Si lo hacéis así, no es necesario pasar por recepción a saldar cuentas al final del crucero. Otra opción es incluir dinero en efectivo en otras máquinas, o acudir a recepción, al final del crucero se cierra la cuenta y se recupera el dinero sobrante.

Volvimos al camarote y ya teníamos las maletas en la puerta, las deshicimos y acudimos a la reunión con el representante de “El corte inglés”. Nos dio su teléfono y bastantes indicaciones sobre la vida a bordo y las excursiones. Mucho más productiva que la reunión propia de MSC.

A las 19:15 nos fuimos al camarote y nos cambiamos para ir al teatro, nuestra sesión era a las 19:30. Nos gustó el espectáculo, era sobre musicales.

Esa noche la vestimenta era casual.

En el restaurante, nos acompañaron a la mesa, allí estaban Fernando y María Jesús una de las parejas con las que estuvimos cenado todos días. Después aparecieron Octavio y su mujer, recién casados.

La cena consta de: Entrantes, Plato principal y postre.

Destacar que los entrantes son pequeños, que hay platos todas las noches iguales por si no os gusta la comida, y que siempre hay pasta y una ensalada. También hay quesos, fruta y helado, además de lo que haya corresponda en la carta de cada noche.

Recordar a los nuevos cruceristas, que podéis comer todo lo que queráis, en nuestro caso dos entrantes, el principal y postre para cada uno y quesos para los dos de forma general.

Después de la cena subimos a la fiesta en la piscina, estuvo bien.

Estábamos muy cansados ya que esa noche no habíamos dormido apenas por el vuelo tempranero, así que acabada la fiesta nos fuimos a dormir.

Ese día habíamos coincidido varias veces con Sandra y Juan, recién casados de Granada con los que hicimos varias de las excursiones, tanto las de MSC como la bajada a los puertos por nuestra cuenta.


DÍA 2 SANTORINI

Esta escala ya la conocíamos así que no cogimos excursión. Desayunamos y bajamos a puerto en las lanchas.

Llegamos a puerto y cogimos el funicular para subir a Fira. El precio es de 6€ por persona. Visitamos la ciudad e hicimos compras. No tiene mucho, las calles son bonitas y hay pequeñas iglesias que están muy bien.

MSC Musica
Cubierta de piscina del MSC Musica - © Elena Ramírez
 
No fuimos a Oia, así que después de tomar una cerveza griega fresquita, bajamos de nuevo al puerto en el funicular. La pareja que iba con nosotros decidió bajar en burro, 3€ por persona, y nos dijeron que estuvo bien. Siempre nos habían asustado este tipo de bajada. También hubo personas que bajaron andando, tener en cuenta que cuesta entre 20 y 30 minutos el bajar a pie, y suele hacer mucho calor. El trayecto es compartido por las personas a pie y las cadenas de burros, el olor es insoportable, así como las escaleras que son algo resbaladizas.

Los que hicieron excursión a Fira y Oia tanto con el barco como con agencias externas volvieron contentos.

El precio de cada subida o bajada en funicular es de 6 € por persona. Cada trayecto de subida o bajada en burro, es de 3 € por persona.

Comimos en el restaurante. Siempre que podemos lo hacemos, ya que se come más tranquilo y ordenado.

Por la tarde fuimos a la piscina, (hay dos), y están siempre llenas. La profundidad es de 1,70 metros, entras y no te puedes mover así que yo no me metí ningún día más, (tienen socorristas).

Nos marchamos a arreglarnos para asistir al teatro, la vestimenta sugerida era casual. El espectáculo nos gustó. No suelen durar mucho, media hora larga, el tiempo justo para que nos diera tiempo a hacernos fotos y asistir a la cena a las 21:00 horas. Después de cenar fuimos a la fiesta de la cubierta 7.

En esta escala es importante saber que hay que coger lanchas y funicular sí o sí. Cuando nosotros llegamos había dos barcos más en la caldera, todos los barcos tienen que usar el funicular, los burros o caminar. Lo normal es usar el funicular así que hay que calcular el tiempo. Al subir no hicimos cola y al bajar tampoco, pero la cola que había para subir cuando nosotros bajamos rondaba la hora o más de espera a pleno sol.

En cada cabina del funicular caben 4 personas y hay 5 cabinas. El tiempo de subida y/o bajada no llega a dos minutos, pero la gente tiene que subir y bajar. Con estos datos ya podéis calcular el tiempo de espera.

Hay que tener en cuenta que hay que volver al barco en lancha, con lo que, dependiendo de la gente, puede haber otro tiempo de espera.


DÍA 3 KUSADASI

Esta fue una de las escalas que nos hacía ilusión visitar. Habíamos elegido la excursión de Éfeso y casa de la Virgen con el barco.

Fuimos al lugar de encuentro y bajamos al autobús. No había mucha distancia hasta la casa de la Virgen. La guía que nos tocó Rosita era una arqueóloga apasionada de su trabajo.

MSC Musica islas Griegas
Éfeso, (Odeón) - © Elena Ramírez
 
Nos dio un tiempo para visitar la casa de la Virgen, coger agua en el manantial, dejar el papel con el deseo en la pared, ir al baño y comprar algunas cosas, vamos por partes.

Nos dirigimos en fila a la casa. Es pequeña, tiene dos salas, nos contó que allí es dónde Juan se fue a vivir para evangelizar al pueblo de Éfeso y de los alrededores. Como dicen los evangelios Jesús le dijo: Juan aquí está tu madre, madre he ahí a tu hijo. Así que Juan desde entonces se hizo cargo de la Virgen y la llevó con él a esa casa. Cuando sales de la visita hay una tiendita dónde comprar botellas vacías para llenarlas con el agua del manantial que surgió en la casa. El agua es potable así que puedes beber y luego llevarte de recuerdo. Además, hay un muro dónde dejar un papelito entre sus grietas con deseos, lo hicimos también y avanzamos hacia la salida.

Antes de salir están los baños. Después de entrar y comprar alguna cosa más en las tiendas que había por allí y tomar agua fresca, nos subimos al autobús para ir a Éfeso.

Recorrimos toda la ciudad antigua. Rosita nos iba explicando todo lo que íbamos viendo con detalle de mitología e historia. La verdad es que nos gustó mucho el lugar y las explicaciones fueron excelentes.

Volvimos al autobús después de pasar por más tiendas dónde tomamos agua ya que el calor era sofocante.

De allí nos llevaron a una fábrica de chaquetas de piel. Esto no nos gustó, primero hicieron un desfile y después intentaron vendernos por todos los medios sus productos.

A Otros grupos, además de la visita a esa tienda, los llevaron a un negocio de venta de alfombras con la consiguiente pérdida de tiempo.

Cuando terminó la excursión en el puerto nos fuimos a recorrer las tiendas que había alrededor. En ellas se puede encontrar falsificaciones de camisetas, polos, bolsos, así como tiendas de plata y oro, además de una piedra curiosa, la Sultanita que cambia de color con la luz.

Después de realizar las compras pertinentes subimos al barco a tiempo de comer en el buffet que cerraba a las 16:00. Luego seguía abierto, pero menos oferta, además, diferentes. Después del café fuimos al camarote a darnos una ducha y descansar del calor y la caminata al sol.

El barco partía a las 18:00 horas, salí al balcón del camarote a ver salir el barco.

La temática de la vestimenta del día es “blanco” así que nos arreglamos y bajamos a hacernos fotos, es de destacar varias cosas. La mayoría de los pasajeros íbamos de blanco, y  noche nos hicieron las fotos, además, de dentro del barco y en las cubiertas exteriores con la magnífica puesta de sol. Precioso.

También acudimos al teatro. Ese día la función fue maravillosa, era de música italiana que hay que decir que me encanta, así que disfruté un montón. Este espectáculo y el del primer día para mí los mejores.

Después de cenar fuimos a la fiesta de blanco en la cubierta 13. Lo pasamos genial.

Nota importante. Hay una excursión a una playa que pertenece a un hotel de 5 estrellas. Los compañeros de mesa hicieron esta excursión, pero nos dijeron que no les gustó nada. No pudieron hacer uso de las instalaciones del hotel, sólo les dio tiempo a darse un baño y que no merecía la pena.


DÍA 4 NAVEGACIÓN

Al ser el día de navegación, decidimos ir a desayunar al restaurante.

De antemano decir que, aunque comer y cenar siempre que podemos vamos al restaurante, el desayuno nos gusta hacerlo siempre en el buffet, pero nos habían hablado de los huevos Benedictine y yo quería probarlos, así que allí fuimos. Efectivamente no nos gustó el sistema, tampoco los huevos. Esto como todo va en gustos.

Estuvimos toda la mañana en la piscina haciendo las actividades que proponían: Aerobic, juegos, juegos en la piscina, bingo… Comimos en el restaurante y fuimos a descansar un rato. Yo normalmente me quedo a ver el mar en el balón o a leer, para mí es un rato muy relajante.

Ese día la vestimenta sugerida era gala. Este tema es curioso, conforme avanzan los años la gente se arregla cada vez menos. Este año la que menos, incluso gente en pantalón corto. Intuyo que llegará un momento en que quiten la vestimenta de gala.

Fuimos al ritual de todas las noches: Teatro, fotos, cubierta a ver anochecer y a cenar. Había copas con zumo, vermut y vino espumoso por todos los salones, y la posibilidad de hacernos fotos con el capitán, el más joven de los que hemos conocido en nuestros años de cruceristas.

Después de cenar no estuvimos mucho tiempo por ahí ya que a las 6:10 nos habían citado para la siguiente excursión ya en el puerto de Haifa.


DÍA 5 HAIFA

Este es otro de los puertos estrella para mí. Elegimos la excursión a Jerusalén y Belén con MSC.

A las 6:10 estábamos en el lugar de quedada después de desayunar en el buffet, abierto desde las 5:30.

Bajamos e hicimos los trámites de entrada en Israel. No nos costó mucho. Nos pidieron pasaportes y nos entregaron una tarjeta con un permiso de estancia en la ciudad para tres meses, pero sin permiso de trabajo. No nos sellaron el pasaporte.

Crucero Islas Griegas con MSC Cruceros
Belén - © Elena Ramírez
 
Tuvimos que esperar a que llegará el autobús con nuestro guía, un argentino con gran conocimiento de historia sagrada que nos fue contando todo lo que veíamos durante el viaje de casi tres horas que nos llevó a Jerusalén. Paramos en un bar restaurante en la carretera dedicado a Elvis para poder entrar al baño, cuando casi habíamos llegado. En él puedes ir al servicio pagando 1€ para dos personas. También puedes tomar café con una taza de recuerdo por 4€. Lo tomas, les das la taza sucia y ellos te la cambian por una taza limpia que te llevas.

El viaje de excursión a Jerusalén dura casi tres horas.            

De allí continuamos hacia Jerusalén y seguimos a la frontera con Palestina para llegar a Belén. Pasamos sin ningún problema. La primera parada fue a una tienda de productos tallados con madera de olivo. Había unos belenes hechos a mano enormes muy bonitos.

Después de realizar las compras nos dirigimos hacia la iglesia de la Natividad. Entramos y visitamos el lugar donde nació Jesús y la basílica cristiana construida dentro de ella.

Después de visitar y hacer montones de fotos nos llevaron a comer a un restaurante. La comida tipo buffet, pasable, ya que teníamos hambre, pero nada más. La bebida había que pagarla a parte.

Después de comer subimos al autobús y nos dirigimos de nuevo a la frontera para llegar a Jerusalén.

Al ir con personas mayores y hacer mucho calor hicimos el recorrido al revés, es decir empezamos por la basílica dónde se encuentra el Gólgota, la losa dónde limpiaban a los muertos para llevarlos a enterrar y el sepulcro. Recorreremos la vía dolorosa de bajada, en sentido contrario a cómo lo hizo Jesucristo. La verdad es que fue más cómodo. Llegamos a buena hora ya que había menos gente que si hubiéramos ido antes.

Empezamos por ver el Gólgota, nos dejaron tocar el lugar dónde estuvo la cruz, ver las losas que la sujetaron, una de ellas rota, según el relato bíblico. Otros grupos no pudieron pasar ya que había un acto religioso y no les dejaron pasar.

Después tocamos la losa dónde depositaban a los fallecidos para limpiarlos antes de enterrarlos, por último, vimos por fuera el sepulcro. Nos dijo el guía que no estaba incluido en la excursión y que había mucha cola. Que si queríamos nos llevaba a un sepulcro de la época. La gente se puso en la cola y lo pudieron ver. Nosotros vimos el sepulcro antiguo y el de Jesucristo desde fuera.

De allí fuimos a la Vía Dolorosa. Comenzamos por el barrio cristiano, tiendas a ambos lados. Paramos en dos de las estaciones del Vía Crucis: La Verónica, entrando en la capilla de una congregación religiosa dónde nos contó el pasaje bíblico y como eran las ejecuciones en la cruz que los romanos hacían en esa época. Continuamos hacia a la estación de Cirineo, nos explicó también lo que dicen los evangelios y tocamos el lugar dónde supuestamente cayó la cruz rompiendo un trozo de la pared.

Seguimos caminando por el barrio árabe, más tiendas a ambos lados y acabamos en el acceso al barrio judío. Aquí hay que pasar por controles policiales de equipaje de mano y personas y se accede al muro de las lamentaciones. Está separado para hombres y mujeres y no se puede acceder juntos. Es curioso porque hay más mujeres que hombres sin embargo las dos terceras partes del muro están reservadas para los hombres y sólo una parte lo está para las mujeres. Nos acercamos a dejar nuestros deseos en el muro y hacernos fotos.

El muro de las lamentaciones está separado para las visitas de hombres y mujeres y no se puede acceder juntos.            

Allí acudimos a los servicios, muy limpios y gratis y nos dirigimos al autobús para iniciar el regreso. Tardamos tres horas aproximadamente en volver. Llegamos sobre las 19:45.

Nosotros subimos a ducharnos al camarote y bajamos al teatro. Esa noche sólo había una sesión a las 20:15. De allí justos a cenar.

La vestimenta era años 60, 70 y 80. No vimos a nadie que vistiera acorde excepto al personal de animación del barco. Hay que tener en cuenta, que ese día las excursiones eran de mucha duración y creo que todos estábamos cansados. De todas formas, la fiesta estaba animada y nosotros estuvimos bailando hasta que se acabó.

He de destacar algunas cosas importantes. No tuvimos sensación de peligro o miedo en ningún momento.

Para entrar en el Sepulcro hay que llevar cubiertos hombros y piernas hasta la rodilla tanto hombres como mujeres, no permiten cubrir con un pañuelo o similar. La excursión no incluye entrar en el Sepulcro porque normalmente hay bastante cola para entrar, pero algunos de nuestros compañeros de grupo entraron mientras el guía nos llevaba a ver el sepulcro de la época. Dentro del Sepulcro no se pueden hacer fotos.
Crucero por las Islas Griegas en invierno
Estación 5 de la Vía Dolorosa - © Elena Ramírez
 
Todo esto creo que es porque nos tocó una persona muy estricta ya que otras semanas anteriores, la persona que custodia la entrada del sepulcro no fue tan estricta.

En el muro de las lamentaciones los hombres deben cubrirse con Kipás, el gorrito con el que los judíos se tapan la cabeza. También sirve una gorra, sombrero o visera. En caso de no tener nada de esto te lo dan ellos. Hay que devolverlo, pero hay hombres que se lo quedan de recuerdo.

En cuanto a las mujeres, hombros cubiertos, te dejan un pañuelo que también se puede llevar de recuerdo. En el resto de basílicas o lugares no era necesario cubrirse. En nuestra excursión no nos dejaron tiempo para comprar nada, así que a los vendedores ambulantes podéis comprarles porque luego no hay tiempo.


EXCURSIONES ALTERNATIVAS OFERTADAS

  • Nazaret y otros pueblos. No conocimos a nadie que la hubiera hecho.
  • Mar Muerto. Nuestros compañeros de mesa la hicieron. Los llevaron allí y se pudieron meter en el agua un máximo de 15 minutos. Dicen que les picaba la piel pero que estuvo muy bien. De allí fueron a comer y seguido a los barros. También les dijeron que el tiempo máximo, siempre por temas de salud, era de 15 minutos y después se tenían que aclarar con agua dulce. Es una excursión aconsejable para pasajeros que no quieran ver lugares de índole religiosa.
  • Otros hicieron sólo Jerusalén y no fueron a Belén. A ellos si les dejaron tiempo libre para comprar y la única diferencia es que no vieron Belén. Nos consta que otras semanas, por temas políticos, no acudieron ir a Belén e hicieron sólo Jerusalén.
  • También había una lanzadera para ir al centro de Haifa que ponía el barco. El precio es de 8€ adulto y 6 € los niños.


DÍA 6. LIMASSOL EN CHIPRE

En Limassol no habíamos reservado excursión. Otros pasajeros fueron a ver una bodega y otros lugares interesantes. Nosotros cogimos la lanzadera de MSC, precio como en Limassol, y nos llevaron al centro, cerca del paseo marítimo. Andando llegamos al castillo. Entramos a visitarlo, todo estaba en inglés y griego. Después de visitarlo nos dirigimos hacia la zona peatonal, pasamos por iglesias chiquititas que visitamos. También paramos a tomar la cerveza local. Chipre nos pareció más barato que Santorini.

Crucero Islas Griegas en verano
Paseo Marítimo de Limassol - © Elena Ramírez

Hicimos algunas compras. Hay que resaltar una tienda en la zona peatonal que tiene productos típicos: Unas gominolas tipo gelatina en unas cajas de lata muy bonitas con el mapa de Chipre. También las tenían de cartón con menos cantidad. Venden frutos secos de todas las clases en crudo y aderezados con azúcar, mantequilla salada, miel… Nos dieron a probar de todo incluido el vino que les dieron a los que hicieron la excursión. Compramos bastantes cosas y seguimos hacia el paseo turístico. No había playa ya que todo son pequeños miradores hacia el mar. No había más que ver así que volvimos para comer en el restaurante del barco.

Nos arreglamos pronto para acudir al coctel especial para los cruceristas del club. Nos hicimos fotos con el capitán y estas nos las regalaron en papel.

Ese día la vestimenta era casual. No fuimos al teatro, aunque nos dijeron que estuvo bien, y optamos por disfrutar de los distintos grupos de música que había en los salones y que otros días no habíamos disfrutado. También nos hicimos fotos y fuimos a proa en la última planta a ver como anochecía, un espectáculo impresionante. Ya se empezaba a notar mucho aire.

Luego acudimos a cenar. Este día los camareros hicieron la típica despedida con canciones y una conga que recorrió todo el restaurante. Hay que tener en cuenta que al día siguiente al llegar por la tarde a Mikonos muchas personas no íbamos a cenar en el restaurante así que era nuestra última cena juntos.

Después, con nuestros compañeros de mesa, fuimos a ver uno de esos concursos para parejas, Romeo y Julieta, después a bailar un rato nos fuimos a descansar, no sin antes ver la luna desde el camarote junto a la estela del mar. Resaltar que hubo super luna llena esos días.

El barco se movió un poco esa noche, no creo que nadie se mareara, pero si se percibía mucho aire y movimiento de las olas del mar.


DÍA 7 MIKONOS

Llegábamos por la tarde así qué por la mañana, después de desayunar, fuimos a la piscina a hacer aerobic y ver el ambiente. Julián tuvo un hueco en el jacuzzi y yo sólo hice uso de la ducha ya que la piscina estaba a rebosar.

Crucero Islas Griegas
Molinos de viento, (Mikonos) - © Elena Ramírez
 
Fuimos a la reunión de desembarque en la que nos explicaron todo, acto seguido nos marchamos a preparar las maletas ya que al llegar por la tarde no íbamos a poder hacerlas en otro momento. Luego fuimos a comer al restaurante y a descansar. Habíamos quedado en salir a las 18:00 horas ya que teníamos intención de cenar en el puerto. Mikonos es otra escala que ya conocíamos así que tampoco hicimos excursión. Nos enteramos que alguna semana no habían podido parar en Mikonos, ni en puerto ni fondeados por causa del aire.

No cogimos la lanzadera del barco, el precio era de 10€. Nos informamos por pasajeros anteriores que justo en el puerto la misma lanzadera valía 2€ la ida y 2€ la vuelta así que nos dirigimos hacia allí y nos llevaron al puerto. Lo primero que visitamos fueron los molinos de viento.

Después recorrimos las callejuelas, las iglesias pequeñitas que salpican el pueblo y realizamos algunas compras. También fuimos a ver la pequeña Venecia. Nos gustó unos de los restaurantes y allí nos sentamos a cenar, justo al lado del mar con el atardecer de cara. Un espectáculo maravilloso. Cenamos bien y no fue excesivamente caro. Un plato para 3, éramos 4, pero nos dijo la persona que nos atendió que con esto teníamos bastante y así fue. Poasteriormente fuimos hacía el puerto a comer unos helados.

Crucero MSC por las Islas Griegas
Puesta de sol en Mikonos - © Elena Ramírez
 
Volvimos al barco donde tomamos algo, aunque había fiesta en la piscina, nos fuimos al camarote a sacar las maletas. Había que hacerlo antes de las 00:00. Yo aún salí fuera del camarote a ver el Mar y como salía el barco.

Había que sacar las maletas al pasillo antes de las 00:00 horas

De las excursiones programadas decir que una que ofrecen a ver un pueblo cercano hablaron muy mal. La única ventaja es que pudieron visitar Mikonos al volver tal y como lo hicimos nosotros y les dio tiempo a ir a cenar al barco. En cuanto a la que se ofreció de visita a Mikonos, con cena y baile, dijeron que no estuvo mal, pero la cena, flojilla.

Creo que en Mikonos lo mejor es hacer la visita por tu cuenta y cenar dónde te apetezca.


DÍA 8 ATENAS Y DESEMBARQUE

El mediodía anterior nos había llegado las etiquetas y los horarios de desembarque. Al no tener excursión, siendo nuestro vuelo algo tarde, nos recogieron a las 16:40.

El barco estaba bastante vacío pues había desembarcado gente y otros pasajeros estaban de excursión. Poco a poco fueron llegando los nuevos cruceristas.

Había que dejar el camarote a las 8:00 como es habitual en todas las navieras. Fuimos a desayunar y a dejar la bolsa de mano con las últimas cosas al lugar de consigna que habían habilitado para ello. Luego desayunamos con tranquilidad y fuimos hacía la piscina. Ese día, tanto la piscina, como los jacuzzis y las hamacas, estaban vacías o casi.

Comimos en el restaurante y esperamos al autobús que nos llevó al aeropuerto. Como a la ida, cuarenta y cinco minutos de trayecto. Llegamos sobre las 17:30. Se nos hizo un poco pesado esperar tantas horas en el barco.

Nosotros no hicimos excursión porque lo que ofrecían ya lo habíamos visto en otro crucero. Los que si la hicieron tuvieron suerte con el tiempo, airecito agradable en la Acrópolis. Les dejaron en el aeropuerto a las 15:45 más o menos. También mucho tiempo de espera.


OTRAS OPCIONES

Que haría yo ahora que sé todo esto. Las maletas están en la terminal, si te bajas del barco ya no puedes subir. Los autobuses turísticos azules llegan a pie de barco, creo que habría bajado y cogido estos buses turísticos, hay que comprobar que efectivamente te llevan a Atenas. También te puedes plantear coger un taxi, comer en Atenas y volver en taxi o bus turístico al puerto a la hora que van a bajar los pasajeros que tenían nuestra hora, coger maletas y de vuelta al aeropuerto. La otra opción es no sacar las maletas y llevarlas en el taxi. Seguro que hay alguna consigna para dejarlas en el centro de la ciudad.

Facturamos tres horas antes del vuelo y de nuevo a esperar a que saliera el avión. Tardamos tres horas en llegar a Barcelona. Las maletas salieron muy muy tarde. O es que estábamos cansados y era tarde, puede ser. Cogimos un taxi y al hotel que teníamos reservado en El Prat.


OBSERVACIONES

1. El paquete de internet básico para mí fue suficiente. Para enviar WhatsApp y buscar cosas por internet sobra.

2. Nos trajimos 206 fotos en formato digital. El paquete amortizado creo yo.

3. Cuando contratas excursiones te llegan los tickets de excursiones directamente al camarote la noche anterior. En ellos pone la hora y el lugar del punto de encuentro.

4. El tema es que te ponen en el grupo que quieren y no sé si se puede cambiar. En otras navieras va por orden de llegada al punto de encuentro.

5. Cuando no tienes excursión y el barco pone lanzadera te dejan en el camarote una tarjeta en la que pones el número de pasajeros si la quieres coger y la llevas al autobús. Allí te hacen firmar y te lo cargan a la cuenta. No hay que ir al mostrador de excursiones con lo cual te ahorras las filas. Es una buena idea.

6. Taxi de Atenas a Pireo a pie de barco 20€ nos dijeron unos cruceristas.

7. Por cierto, siempre encontramos hamacas libres, incluso en la piscina principal. No sentimos ninguna sensación de agobio en el barco a ninguna hora.

8. Es inevitable que nosotros comparemos esta compañía con Costa Cruceros con los que hemos hecho los 9 últimos. Hay que decir que las dos tienen cosas que me gustan y otras en las que prefiero una naviera a la otra.

9. Me habían dicho que la comida era muy buena en MSC. En este barco por lo menos, y para mi gusto, no lo es. En Costa mucho mejor, con diferencia.

10. La hora de cena mucho mejor en este barco, pero no sé si es por el itinerario. Cenar a las 21:00 horas me gusta más que a las 21:45 que cenamos en el Consta Firenze el verano pasado.

11. En Costa hay entrantes, primer plato, segundo plato y postre. Aquí sólo entrantes, plato principal y postre. Mucho menos para elegir. Esto tiene una ventaja en MSC, que tardas menos en cenar.

12. En Costa te ponen un entrante, y si has pedido dos, te ponen el otro cuando acabas. Aquí todo amontonado en la mesa.

13. En cuanto al buffet en MSC muchas horas abierto, lo que te posibilita comer cuando vuelves de excursión. En costa te lo encuentras cerrado, aunque vuelvas de sus excursiones. Además, hay hamburguesas y pizzas gratis a todas horas en MSC mientras que en costa son de pago.

14. En MSC encuentras ensaladas, fruta cortada y por piezas a todas horas o casi. En Costa nada de nada. En el restaurante hay una ensalada siempre y pasta una o dos, en Costa abusan mucho de platos de pasta, lasaña...

15. Los helados en Costa son de pago y en MSC también, pero de postre en el restaurante siempre puedes pedirlos.

16. En Costa suele haber en el desayuno una estación dónde te hacen tortillas y huevos en el momento. En MSC, por lo menos en el Música, no hay.

17. En MSC te hacen el camarote dos veces, un día casi nos echó el chico para hacerlo por la tarde. En Costa sólo una vez.

18. En costa los cócteles mucho mejores. Aquí no nos gustó ninguno, ni pagando los que no entraban en el paquete de bebidas. En cambio, en MSC te dan todas las botellas de agua que quieresen Costa, vasos y sólo una botella de medio litro por persona y día. Este año he bebido mucha agua así que aquí mejor. En MSC los refrescos son de lata, en Costa de grifo. Por lo demás, hay pocas diferencias.


Queremos dar las gracias al representante de “El Corte inglés” en el barco. La información que nos dio mucho mejor que la que nos dieron en el propio barco.

También agradecer a los compañeros cruceristas que hicieron que esta semana haya sido mucho más agradable. Mención especial a la familia de Barcelona con trillizos: Xana, Unai y Yago. A los profes de física y química, Carlos, su mujer y a sus hijos Lucía y el niño que no recuerdo su nombre. A nuestros compañeros de mesa: Fernando y María Jesús y Octavio y su mujer.

Y desde luego a Juan y Sandra con los que hemos compartido comidas, excursiones y ratos que recordaremos siempre.



Por:
Cruceroviajes
Cruceroviajes, tu web de viajes y cruceros 

Comparte este artículo en tus redes sociales aquí debajo

Cruceroviajes

Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente