La disyuntiva del desguace en época de pandemia


Pullmantur


DESGUACE DE CRUCEROS EN ÉPOCA DE PANDEMIA


La inactividad a consecuencia del Covid19 ha sumido a la industria de los cruceros en una paralización total y preocupante. El episodio más significativo ha sido el sismo provocado en Pullmantur Cruceros, que, según las leyes españolas, ha entrado, en un proceso de quiebra por Insolvencia, A partir de allí se dispararon las alarmas de preocupación en casi todos los grupos que reúnen a cruceristas afines a esa naviera, muchos de ellos preocupados porque tienen viajes contratados y/o cancelados a reprogramar, ya contratados con la naviera.

Según las noticias que se iban recibiendo en estos días, iba cambiando el estado de ánimo de muchos cruceristas, pasando de la alegría, (cuando surgió la noticia de que Royal Caribbean se haría cargo de todos los recorridos), a la decepción total (con las noticias que entraron a circular sobre al desguace de los tres barcos). Respecto a esta última noticia, en los distintos grupos de los seguidores de Pullmantur, hay muchos usuarios que están preguntando cuál es el sentido de desguazar los barcos..., y vienen sus dudas con otras preguntas más:

¿Porque deshacerse de ellos si hace poco fueron reformados?
¿Porque no los venden, si todos tienen su valor?
¿Porqué simplemente no los paran y esperan a que pase el tema de la Pandemia?...

Para todos los que se hacen estos cuestionamientos va esta explicación, no si antes volver a reiterar una aclaración ya hecha, pero que muchos aún hoy siguen sin poder entenderlo o interpretarlo correctamente.

Horizon de Pullmantur
Excelente equipo de animación del Horizon - Foto: Cruceroviajes

Royal Caribbean es accionista de Pullmantur. Tiene allí su participación del 49%, o sea que no es accionista mayoritario. Pero los barcos no tienen nada que ver con Pullmantur, ya que Royal Caribbean es la dueña absoluta de los 3 barcos (el 100%), por lo que desde ese punto de vista, puede hacer con los barcos lo que considere más apropiado para su negocio y funcionalidad como empresa, como de hecho ya lo hizo cuando vendió el Zenith, ni bien tuvo una oferta por él. Es entonces Royal Caribbean la que decide qué hacer con los barcos: sea mantenerlos o desguazarlos.

Ahora bien, vamos al tema principal de esta publicación.

1) - Hace más de 5 años que los barcos están en catálogos de venta. Esos catálogos no son manejados por las propias Navieras, sino que son una estrategia de personas u organizaciones que buscan hacer su propio negocio, ganándose una comisión por su intermediación en la operación de compra-venta (obviamente una comisión de un número con muchos ceros). Como método de trabajo incluyen en esos catálogos a todos los barcos en uso con 20 o más años de antigüedad, que son los que más gastos le provocan a una naviera. Claramente esas publicaciones las hacen aún sin la aprobación de las navieras, que obviamente "dejan hacer", porque no deja de ser un canal de venta en el que ellos se mantienen al margen de la responsabilidad, pero que si aparece esta gente a decirles "tengo un comprador para tal barco", la naviera seguramente se mostrará interesada, más si operativamente le conviene la operación . No es alocado imaginar que la venta del Zenith ha ocurrido de esta manera.

2) - Más allá que la naviera no tenga nada que ver con los catálogos de ventas, lo real y cierto es que si durante años de estar publicados los barcos, no ha aparecido alguien interesado en ellos, difícilmente eso vaya a ocurrir en esta época de crisis. Los probables compradores de barcos que suelen surgir en este tipo de crisis, van por los barcos antiguos, pero no tanto como estos tres... digamos que tienen muchas más posibilidades de ser vendidos aquellos barcos de aproximadamente 20 años y, aún si esto llegase a ocurrir, ya serian arreglos entre Navieras en forma directa.

3) - Los barcos no son viejos... Son viejísimos!! Lo que ocurre es que nos encariñamos con ellos porque los hemos vivido y disfrutado, pero los barcos son como los autos, mientras más viejos más gastos, nada más que los gastos de un barco obviamente no son los mismos que un auto, (no hace falta decirlo): Mantenimiento, roturas, reparaciones, mayor consumo de combustible, mayores costos de seguros... las mismas peripecias de un auto viejo, pero multiplicado por varios miles. Es cierto que los barcos sufrieron reformas no hace mucho, pero todas fueron estéticas!!... Los barcos continuaron siendo igual de viejos. Las remodelaciones le quitan años visualmente , pero en sus entrañas y tecnicismos, los barcos siguen teniendo los mismos años... Ni uno menos!!

4) - en esta crisis a causa del Coronavirus, todas las navieras por igual están afectadas económicamente. Así como Pullmantur ha entrado en proceso de quiebra por insolvencia, no sería extraño que, lamentablemente, lleguemos a ver a alguna otra en igual o aproximada situación. Al margen de esta suposición, son varias las navieras que están en serios aprietos económicos. Carnival, por ejemplo, ya anunció que sale a vender 6 barcos de su flota, y ahora salió a decir que quizá algún par más. Royal Caribbean y otras Navieras han suspendido la entrada de sus barcos a dique seco para reformas y embellecimiento, (no es época de andar gastando!)... y así viene la mano!! En este contexto, deshacerse de barcos antiguos mandándolos a desguace, puede significar más beneficioso que quedárselos y seguir sumando gastos mes a mes teniéndolos inactivos totalmente. Respecto a los gastos, un dato en el que quizá muchos no reparan. Y vale al caso una pregunta: ¿Porqué razón la gran mayoría de los barcos inmovilizados por la pandemia están fondeados en el mar y no en un puerto seguro?, porque los atraques en los muelles se cobran, y las tasas por día son de varias decenas de miles de dólares!!. Y por razones de seguridad, entre otras, las embarcaciones viejas no pueden permanecer fondeadas durante mucho tiempo, de allí que el Monarch permaneció amarrado en Colón, el Sovereign en Málaga y el Horizon en Dubai... Y en todas esas estadías fueron varios cientos de miles de dólares de gastos (sino más).

Ante esto tenemos que comprender, (aunque cueste el razonamiento desde nuestra lógica de consumidores), que en situaciones de crisis extrema como la actual, los barcos viejos actúan para las navieras como un fusible: se queman para evitar un mal mayor. Lo que significa: Es mejor "perder" algún barco viejo antes que por los gastos por mantenerlo se terminen perdiendo los nuevos, o lo que seria peor aún, perdiendo quizá hasta la empresa misma.

Muchos de nosotros podremos ver esto como inentendible, pero eso es, insisto, por el cariño que sentimos por la empresa y por los barcos... y porque somos sólo usuarios de ellos. Si en vez de usuarios fuésemos los dueños, seguramente ya no lo veríamos de la misma manera... y hasta quizá también estaríamos agarrándonos la cabeza y pensando en librarnos de ellos para no sufrir una mayor consecuencia.

Enrique Ricatti
Colaborador y analista de cruceros

Por:
Cruceroviajes
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